La Anguila Europea de río (Anguilla anguilla) es un pez de cuerpo alargado, color pardo oscuro, de hasta 2 metros de longitud y que pueden llegar a vivir 12 años. Para completar su ciclo vital emigra del agua dulce de los ríos al mar para desovar; en concreto, la Anguila Europea lo hace en el Mar de los Sagarzos, a casi 4.000 kilómetros de distancia y a más de 500 metros de profundidad. Una vez nacidos, los alevines de este pez –las conocidas angulas- emprenden el viaje de vuelta a los lugares de donde partieron sus progenitores. Entre cauces, acequias y pozos transcurre la vida de la angula mientras crece, madura y se transforma en la anguila.
En la actualidad la población de esta especie se ha reducido notablemente. En los últimos 50 años su población ha quedado reducida al 1% debido, ante todo, a la contaminación de ríos, la sobrepesca y la innumerable cantidad de obstáculos que el hombre ha puesto a su paso. Presas y centrales hidroeléctricas son algunos de los que impiden que complete su ciclo.
Los Agentes Forestales, alertados por Policía Local de Valdemorillo, localizaron el ejemplar, cuya muerte era reciente, en las orillas del embalse de Valmayor. Este embalse, situado en la zona norte de Madrid extiende sus aguas por los términos municipales de El Escorial, Galapagar, Valdemorillo y Colmenarejo y con casi 20 kilómetros de perímetro, es uno de los que abastece de agua potable a diferentes ciudades de la Comunidad. Soporta, además, una elevada presión por parte de aficionados a la pesca del lucio, la perca, la carpa, el perca-sol, el black bass, etc. Sin embargo, desde hace mucho tiempo no había citas de este animal en la Comunidad de Madrid, hasta el punto de que se daba por extinguido. Por este motivo y ante la importancia del hecho, los Agentes han efectuado el traslado del espécimen al Centro de Fauna (CRAS-Tres Cantos) para que se investigue la posible reintroducción de ejemplares de esta especie por parte de algún grupo de pescadores. Se tiene conocimiento de este tipo de prácticas en embalses de la provincia de Ávila, por lo cual es importante determinar si ésta procede de piscifactoría o por el contrario es un ejemplar silvestre. Es necesario recalcar la dificultad que tienen estos animales para poder completar su ciclo emigrando del río al mar (al contrario que los salmones) y por tanto, la poca probabilidad de que se trate de poblaciones naturales y estables.
Una vez más desde el Cuerpo de Agentes Forestales de la Comunidad de Madrid se recuerda que para cualquier emergencia ambiental contacten con el teléfono 900181628.
1 comentario:
Lo malo de las hidroeléctricas es que no tienen compasión por los ecosistemas y especies que habitan cerca y las especies más afectadas son las que viven en el agua. La humanidad debería empezar a usar fuentes de energía renovable para que así el mundo empiece a recuperarse un poco de la tanta contaminacion que hay.
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