“El zorro, explica Palacios, a mí me parece una especie muy beneficiosa en todos los sentidos, que además es muy bonita, muy atractiva, una especie muy inteligente, que adorna la naturaleza y que además cumple una importante función.
A nivel científico es una especie que contribuye al estado sanitario de las presas, principalmente del conejo. Por otro lado contribuye al control de las plagas tanto de micromamíferos como de ortopteros, sobre todo.
Consume una gran cantidad de locústidos, de saltamontes y de grillotálpidos que, en forma de plagas dañan grandes cantidades de vegetación. Consume gran cantidad de escolopendras y de escorpiones que son especies muy temidas por la población humana. Gran cantidad de apodemus sylvaticus, de mus spretus, el ratón moruno, que es una especie muy asociada a los cultivos en España y además es una especie casi endémica porque prácticamente solo habita en la península ibérica. El zorro consume además grandes cantidades de topillo ibérico microtus duodecimcostatus, es decir que desde este punto de vista los agricultores le tendría que estar muy agradecidos”, asegura.
Sobre la persecución a la que el zorro es sometido por parte de los cazadores, Palacios hace la siguiente reflexión: “Al contrario de lo que muchos creen, su incidencia sobre las especies de caza, exceptuando el conejo no es muy alta. La perdiz apenas la consume, salvo casos muy raros entre los que se encuentran las perdices heridas en las partidas de caza. No come apenas pollos de perdiz y huevos, al contrario de los que se piensa. Come muchísimos vegetales, muchos frutos, como los higos que los consume de una forma impresionante al igual que las algarrobas. De hecho, en otoño, puede estar viviendo exclusivamente de la zarzamora y de los saltamontes y no consumir ningún vertebrado ni nada similar.
Hay épocas del año que no incide en absoluto sobre las especies de caza, que es principalmente el motivo de la persecución que sufre este animal. Y sobre el conejo, la labor que realiza para eliminar ejemplares enfermos, es muy beneficiosa.
Los agricultores, en su vertiente cazadora, son muy ignorantes con respecto al zorro. Los daños que tiene el conejo sobre los cultivos son extraordinarios y el hecho de que haya una especie como el zorro o el propio búho real depredando al conejo es tremendamente beneficioso. Por otro lado, una especie como el topillo ibérico, que vive en los cultivos y que sólo huye de los mismos cuando se refugia en los ribazos, se instala en los cultivos para consumir o bien la planta verde o bien el grano de la espiga. El zorro consume gran cantidad de topillo mediterráneo y los agricultores ignoran eso.
Hace poco conocí el caso del Parque de los Cerros de Alcalá de Henares, en el que los agricultores decían que los jabalíes consumían la siembra. Y era falso porque lo que estaban haciendo los jabalíes en ese momento era cavar la siembra para consumir los topillos mediterráneos y no la siembra. El jabalí consume muchos topillos. Se pone a hozar en las colonias subterráneas hasta que encuentra los nidos. Los agricultores estaban pidiendo algo que es contraproducente para ellos que es acabar con los jabalíes que les están ayudando para acabar con la plaga de topillos. Y normalmente como todos estas cuestiones se desencadenan bajo criterios de desorientación o de falta de información, se persigue al zorro y a otras especies, pero sobre todo al zorro fundamentalmente y en absoluto está justificado”, finaliza Fernando Palacios.
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