LOS GANADEROS MADRILEÑOS SOLICITAN AYUDAS A LA COMUNIDAD DE MADRID POR LOS ATAQUES DE LOBOS

Hace dos años, La Ventana Forestal se hacía eco de los ataques al ganado que se estaban produciendo en la localidad madrileña de Somosierra. Hablamos con Fernando y Jacinto Cerezo, propietarios de una explotación ovina en las inmediaciones de la localidad. Ambos nos transmitieron sus problemas, se quejaban de que la Comunidad de Madrid no les ayudaba ante estos ataques y nos mostraron incluso los cadáveres de las últimas ovejas atacadas.
http://ventanaforestal.blogspot.com/2008/08/el-lobo-en-madrid.html

Decían, Fernando y Jacinto, que la Comunidad negaba que los ataques fuesen de lobo.
Ahora, la Unión de Agricultores, Ganaderos y Silvicultores de la Comunidad de Madrid (UGAMA) ha redactado en manifiesto “Por la defensa de nuestro ganado y la compensación de pérdidas de los ganaderos, frente a los ataques de lobos en la Comunidad de Madrid”, por el que solicitan al Gobierno regional que apruebe ya la línea da ayudas frente a las agresiones de estos animales.


Esta decisión se ha acordado en el transcurso de una asamblea convocada por el presidente de UGAMA, Javier Briceño, y el resto de la comisión ejecutiva de esta organización profesional agraria madrileña.

La asociación ganadera ha anunciado que en los próximos días se va a proceder a recoger firmas en apoyo a este manifiesto. Además, recuerdan que han interpuesto diferentes denuncias ante la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio y han entregado “el correspondiente material audiovisual que certifica la presencia del lobo en la Comunidad de Madrid, y los ataques al ganado”.

UGAMA entiende que la convivencia entre la actividad ganadera con la fauna salvaje en general, y con el lobo ibérico (Canis lupus signatus) en particular, “es complicada”. Por este motivo desea transmitir a la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio “la sensación de abandono de los ganaderos por parte de las administraciones competentes, a pesar de la labor esencial que se realiza tanto a la hora de proporcionar alimentos sanos y de calidad a la población, como de preservar el medio ambiente, ya que el manejo del ganado es principalmente en extensivo”.

“Para la Comunidad de Madrid y la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio no supone demasiado esfuerzo presupuestario indemnizar a los ganaderos afectados por los daños que produce la fauna salvaje, incluyendo el lobo”, ha señalado la Unión de Ganaderos.
A su juicio, se trataría de una indemnización “necesaria” para la compatibilidad de la actividad ganadera con la presencia de fauna salvaje en las Sierras de Madrid.
UGAMA solicita que se abran líneas de ayuda (que ya existen en otras Comunidades Autónomas, como Castilla La Mancha y Castilla y León), “en condiciones justas” para los ganaderos, así como que se aprovechen los fondos europeos destinados a este respecto. Demandan a su vez las medidas “necesarias y efectivas” para el control de la población de lobos.

PRESENCIA CONSTATADA DE LOBOS

Técnicos de Medio Ambiente constataron por primera vez de manera oficial a finales del año pasado la presencia de dos lobos merodeando por Somosierra. Los depredadores provenían concretamente de Segovia. Eran ejemplares marcados por los técnicos de la Junta de Castilla y León en esas fechas.
Aunque el lobo ha pasado la frontera madrileña, aún no existen manadas, ni poblaciones estables ni mucho menos ataques a cabezas de ganado, según han informado a Europa Press fuentes de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio que hace cuatro meses confirmaron la elaboración de una orden de ayudas económicas a ganaderos ante posibles ataques futuros.
En Castilla y León los pastores reciben también una compensación por res muerta. Para percibir la subvención los ganaderos han de tener una póliza de seguro y acreditar que el ataque ha sido producido por un lobo.
La Consejería también recuerda la prohibición de cazar lobos, una especie en peligro de extinción. En casi toda Europa el lobo cuenta con protección plena. Entre Zamora y Galicia, donde proceden los ejemplares que llegan a Madrid, viven entre 1.500 y 2.000 ejemplares, y es Asturias donde la especie está experimentando un auge más importante, ya que en esta comunidad está prohibida la caza.

CONSOLIDADO EN CASTILLA Y LEÓN
El “canis lupus” o lobo ibérico ha consolidado desde hace varios años su presencia en Castilla y León desde uno de los últimos reductos, en los que pudo sobrevivir a su pasada etapa en peligro de extinción, la sierra de la Culebra de Zamora.
Tras sortear el río Duero, llegó a la provincia de Valladolid, y luego a Ávila, Segovia y más recientemente a Guadalajara. En este último itinerario pasa irremediablemente por la región madrileña, y desde 2008 varios grupos de personas los han visto, aunque todos ellos coinciden que todavía no hay ningún grupo firme y asentado en algún punto de la Comunidad.
Así, agentes forestales que trabajan en la zona afirmaron a Europa Press que todo comenzó a finales de 2007, cuando apareció un supuesto ejemplar de lobo atropellado en la A-1 , a la altura del municipio de La Acebeda. Aunque Medio Ambiente no llegó a confirmar este extremo, tanto vecinos como guardabosques comenzaron a avistar a varios lobos puntualmente y recogieron indicios de su presencia.

Por su parte, los biólogos consideran que la región carece de animales salvajes o de pastoreo suficientes y susceptibles de ser depredados por el lobo. Su alimento suelen ser corzos o jabalíes, aunque si tiene hambre puede cazar ovejas o vacas, incluso, en una situación muy desesperada, seres humanos. Tampoco es difícil que se habitúe a los recursos del propio hábitat. Así, no es difícil ver merodear a algún lobo por un estercolero o cazar topillos en los últimos tiempos en Castilla y León.

Por último, diversas asociaciones ecologistas consultadas por Europa Press afirmaron que existen movimientos de estos depredadores por la sierra nordeste de la región, aunque no esté contabilizado su número, “ante la ausencia de un estudio científico que permita controlar su situación y reproducción”. Por ello, solicitaron a la Comunidad de Madrid que elabore una normativa específica que contemple medidas de protección de esta especie para facilitar la conservación y recuperación de su hábitat.

Fuente: Europa Press