El artefacto, que se piensa que corresponde a la guerra civil, se encontraba cercano a un árbol recientemente descalzado, que en su caída podía haberlo dejado al descubierto, resultando peligroso al encontrarse próximo a una pista frecuentada por ciclistas y senderistas, en el interior de un coto de caza. Igualmente podría suponer una amenaza en caso de incendio forestal, tanto para el medio natural como para el personal actuante en su extinción.
Activados los TEDAX, verificaron que se trataba de un proyectil sin explosionar, calibre 105, con alrededor de 2 kilogramos de explosivo. Procedieron a retirar el proyectil de la zona, para realizar una explosión controlada.
De nuevo situaciones como ésta demuestran la necesidad de que el Cuerpo de Agentes Forestales se encuentre integrado en el operativo 112, tanto para recepción de emergencias relacionadas con sus funciones como en el inicio de actuaciones que permitan un uso adecuado y seguro de nuestro monte.
Fuente: APAF
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